Nunca te ha pasado que te pones una blusa, sin mangas, flojita, fresquita y a las dos horas… hueles a choto? A mí sí, y si yo olía mal la blusa ni te cuento. Antes de interesarme por los materiales de las telas (no por las telas en sí, que siempre me han fascinado) asumía que algunas telas transpiraban mal, cogían mal olor, y punto. Pero ahora sé más, mucho más, de por qué cogen semejante peste y cómo evitarlo.
Lo que te pones en la piel
Lo que te pones en la piel
Lo que te pones en la piel
Nunca te ha pasado que te pones una blusa, sin mangas, flojita, fresquita y a las dos horas… hueles a choto? A mí sí, y si yo olía mal la blusa ni te cuento. Antes de interesarme por los materiales de las telas (no por las telas en sí, que siempre me han fascinado) asumía que algunas telas transpiraban mal, cogían mal olor, y punto. Pero ahora sé más, mucho más, de por qué cogen semejante peste y cómo evitarlo.